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ANDRIU, ANDREA LUSI, EN UNA IMPECABLE ACTUACION EN El Correo
Cultura Pipi - Remedios De Escalada, Conurbano Sur, PRESENTO SU REPERTORIO EN
EL QUE LE HACE UN HOMENAJE A TITA MERELLO.
Juanqui-viarrapida-6 de Junio del 2016. Buenos Aires.
Argentina.
Con un salón lleno y expectante, ANDRIU, Andrea Lusi
presento en El Correo Cultura Pipi, en la localidad de Remedio de Escalada un
repertorio en el que homenajea a TITA MERELLO y pone en el escenario un clima
especial que recibe el público en absoluto silencio y compenetrado en las
letras que Andriu ha elegido para esta presentación.
El Tango, la música y letras que identifica notablemente
nuestra costumbre, esa cultura que nos muestra en el mundo con la particular
personalidad porteña, mundana, de barrio, intelectual, arrabalera, cultora de
las bellas artes, protagonistas apasionados de amores afortunados, tormentosos,
engañados, traicionados, o, deslumbrado por el brillo del dinero que todo lo
compra y, El Tango lo va pintando con los colores de la vida.
Tita Merello una de las artistas que supo trasmitir todas
estas modalidades de la cultura que nos pinta de cuerpo entero en cada una sus
canciones, es hoy, recordada por Andriu, Andrea Lusi, con una excelente
caracterización que nos muestra en su técnica vocal, donde la impostación, que
modula en cada uno de los temas elegidos, resalta en tiempo y espacio los
momentos sociales y humano de cada época.
Andriu se caracterizó para la ocasión con un Top de fondo
lanco con lunares negros y un escote generoso que dejaba al descubierto sus
hombros y provocativamente sensual, y…asomaba El corazón en Llama, uno de los
temas que interpreto para recordar el gran amor de Tita, por Luis Sandrini.
Pollera tubo negra, resaltaba su figura, medias negras y
zapatos del mismo color, daban la presencia de la época en que se desarrollaba
cada uno de los temas interpretados. El Garbo, La pinta de Arrabalera, tema con que inicio su
actuación, la ponían en perfecta sintonía con la época donde se desarrolló la
escena y nació la letra.
Sus manos cubierta por guantes de color blanco, que cubría
generosamente mas arriba de las muñecas, y una boquilla, donde asomaba un
cigarrillo, costumbre de la época, Andriu, se adueñó del escenario y atrajo la
atención de los espectadores que no se perdían detalles de los que la actriz y
cantante les iba contando de los tiempo de Tita Merello.
Su arte interpretativo, su experiencia escénica, le daban un
matiz especial, que Andriu ofrecía al público y acompañaba con ademanes
apropiados, que dibujaba el contenido de la letra y ponía los colores
apropiados con su voz, y mostraba literalmente al espectador el cuadro
imaginario de la vida donde Tita Merello era la protagonista.
Andrea Lusi cuido al máximo los detalles de su
caracterización, el peinado y su bijouterie también era de época. Lusi, en cuerpo y alma esta
preparada para homenajear a Tita Merello y exhibe en detalles la moda de la
época, en una verdadera puesta en escena de su arte interpretativo, su
desempeño de actriz, cantante y modelo que luce orgullosa la ropa de NARANJO EN
FLOR, nada mas apropiado que los diseños de Elizabet Alvarez, dueña de esta
prestigiosa marca de Ropa para Bailar Tangos y presentaciones en la milongas
tradicionales en esta capital universal del tango.
EYA; Andriu, se desplaza con displicente naturalidad en el
escenario y pulsa la atención del público y se dirige coloquialmente
proponiendo un encuentro emocional y visual de su personalidad escénica y con
sus interpretación física y el fraseo, su impostación y modulación plasma el cuadro
en el ambiente que lo agradece con cerrados aplausos. Wooooouuuu, La Lusi
nuevamente me desordenaba emocionalmente dejando al descubierto mi flaqueza por
EYA.
Y cuando escuche “Corazon en Llamas”, me llego profundamente
su voz, su entonación, el fraseo y modulación que me desordeno emocionalmente,
y, solo deje que las lágrimas cayeran sin poder levantarlas…No podía dejar de
filmar. La impostación, el tono que le dio, tuvo un toque especial que me
desestabilizo…Y se vino a mi memoria entre lágrimas que caian…”me desordenas
amor, me desordenas…(Casilda Oliver) Su voz apasionada, llena de dolor y
ternura, me postraban ante su presencia…Queria correr a contenerla. Andriu,
Andriu, Andriu me repetia.
Arrabalera, Se Dice de Mi, Milonga Sentimental, Donde Hay un
Mango y los demás, super conocidos por el repertorio que identifican a Tita
Merello que impuso la modalidad del fraseo muy particular, su decir único y
arrabalero, lleno de sentimiento y cruda pasión, se metieron en Lusi para dejar
quieto, en suspenso al público y a mí, que la escuchábamos y mirábamos viviendo
imaginariamente esos momentos de “Se dice que soy fiera, Que camino a lo
malevo, Que soy chueca y que me muevo. Con un aire compadrón…”
Todas las canciones que interpreto, tienen particularmente
un ritmo propio del arrabal, del tiempo social en que se desarrolló la escena,
mostraba la crudeza de un decir cotidiano, que orillaba y se adentraba en los
fondos destartalados de la sociedad que no vivía en El centro ni chamuyaba como en la Recoleta, si no, como en los
barrios populares y reinaban los conventillos. Lusi, le daba ese encanto
especial moviéndose al ritmo de un swing cadencioso sensual y arrabalero.
Se lució La Lusi. Y me agigante como como Kin Kong en Nueva
York, cuando escuche que me dedicaba “Vendras Alguna Vez” Y fue el sutil
estoque al corazón, al alma y espíritu que se embriagaban al escucharla y mirar
el contoneo seductor. Ese momento me inquieta de tal forma que mientras gravo
pienso, si no estuviera filmando, salto al escenario y la abrazo
escandalosamente pasional.
Andriu estuvo asistida por el guitarrista Nestor Palacios y
en el sonido por los asistentes del Centro Cultural y Ricardo Norro y Alfredo
Lafuente. Debo resaltar la atención de los que nos brindaron el servicio
gastronómico, profesionalmente cálido y cordial.
Y ahí, cuando la noche mediaba, Laurita, Juan y Yo,
comentando del momento vivido maravillosamente bien, caminábamos unos metros
para tomar un Remis, que es lo que se estila en la zona y pusimos proa al
destino de regreso. Nuestra jornada llegaba a su fin. Laurita tuvo la
importante misión de filmar desde un Angulo a su elección, por ende, fue mi
coequiper y Juan, el anfitrión porque cuando fui a pagar, me dijeron que ya lo
habían hecho.
Juan, el esposo de Laurita se había adelantado. Un gesto
para tener en cuenta en los que caminamos la noche, digno compañero, dado que a
veces, la falta de gimnasia de algunos compañeros ocasionales, son lerdos para
meter la mano en el bolsillo. Estos gestos nos indican con quien compartir un
momento agradable. Linda noche la del viernes 3 de junio.
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