El viernes 10 de setiembre, se presentó
en el escenario mayor de la Casa de la Cultura
de Adrogué, el "tata" Carlos Cima,
seguramente el representante tanguero
más genuino de Almirante Brown.-
Ya clasificado para las finales de los torneos bonaerenses, puso a consideración del público, su continuidad en la preferencia del gusto artístico de la comunidad tanguera y certifico que salió airoso.-
Estuvo, en esta oportunidad, acompañado por las guitarras de Oscar Gentileza y Julio Alvarez, dos maestros, que con la interpretación de tres temas instrumentales, demostraron porqué son los preferidos de la gente.-
En la barra tanguera de Adrogué, se ha instalado una premisa "donde canta el tata Cima, yo no puedo estar sin ir" y todos estuvieron presentes para disfrutar, tangos, valses y alguna milonga, que en su voz y su expresión, despierta la pasión indispensable para este género musical.-
Sus sobresalientes aptitudes y su hermoso timbre de voz, reminiscentede Floreal Ruiz, quedaron de manifiesto en sus interpretaciones de alta jerarquía de: Tiempos viejos, Destellos, En la vía, Puentecito de plata, Baldosa floja y sobre todo en Que me van a Hablar de amor, esa letra hermosa de Homero Exposito que nos recuerda "andando de rodillas, se cuidan los zapatos".-
Fuí invitado a decir algunas palabras y me pareció más adecuado recitar una parte de un poema que escribí para él:
- Es un tango de primera
para mal o para bien
donde hace falta se queda
y donde sobra también.-
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