Domínguez, abucheado por productores en Balcarce
Fue recibido con silbidos e insultos al abrir un seminario ganadero
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BALCARCE.- Pese al descontento de los productores rurales con la política del Gobierno hacia el campo, el ministro de Agricultura, Julián Domínguez, muy pocas veces había sido criticado por los productores rurales. Por su tono conciliador y su espíritu dialoguista no era identificado con la imagen de confrontación del resto de los funcionarios. Sin embargo, ayer, ese clima pareció haberse roto cuando Domínguez fue silbado y abucheado por cientos de productores ganaderos que participaron de las jornadas técnicas organizadas por el Instituto de Promoción de Carne Vacuna Argentina (Ipcva) y el INTA.
Domínguez llegó al Polideportivo Municipal de Balcarce, a las 9, para abrir las jornadas. En el momento de ingresar en el salón para subir al estrado, un productor se levantó de su silla y le gritó al ministro: "¡Yo vine a escuchar a los técnicos. Si me hubieran avisado que venía este señor, yo no venía a estas jornadas!". Se trataba de Alfredo Adolfo Giusti, ganadero del partido bonaerense de Rauch. En ese momento Domínguez se acercó de buen modo al hombre para tratar de calmarlo y le respondió: "Le pido respeto, no por mí, sino por el país". Pero Giusti le respondió: "Por el país ustedes deberían haberse ido hace rato", y se retiró del lugar.
Luego, el ministro no pudo disimular su incomodidad y los nervios que le había causado el mal momento y dio su discurso de inauguración de las jornadas a gran velocidad. El mensaje fue eminentemente técnico, referido a las charlas programadas. Cuando concluyó su alocución, los pocos aplausos fueron tapados por silbidos y expresiones de descontento.
Sin complejos"No me arrepiento de haber venido, me pone feliz que pase esto en democracia. Está muy bien que la gente exprese su estado de ánimo, pero me hubiera gustado que me contaran las razones del descontento, dejando de lado las pasiones", dijo el ministro ante la pregunta de LA NACION acerca del episodio vivido. "Esta es la tarea de construir confianza; somos nosotros los responsables, por eso no me arrepiento de haber venido", agregó, ya más tranquilo, al finalizar la conferencia de prensa, en la que fue consultado sobre otros temas. Domínguez se refirió a las exportaciones de carne asegurando que "este año tendremos un umbral mínimo de 400.000 toneladas para exportar".
Fuentes de la cartera agrícola minimizaron el episodio y dijeron que Domínguez sigue dialogando con las entidades del campo.
El descontento de los productores ganaderos con el Gobierno se debe a las restricciones a las exportaciones de carne impuestas desde 2006, que deprimieron los precios de la hacienda. También, rechazan las intervenciones del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, en el mercado de la carne.
Respecto del papel del polémico secretario en el otorgamiento de los permisos de exportación de granos y carnes, Domínguez respondió: "La política es una sola y la imparte la Presidenta; eso es algo institucional, son criterios objetivos. El manejo de los ROE [Registros de Operaciones de Exportación] lo decide el Ministerio de Agricultura".
Sobre la comercialización de granos y ciertos rumores de reinstaurar la Junta Nacional de Granos, Domínguez sostuvo que "el problema es la vulnerabilidad del primer eslabón de la cadena: el productor. Estoy convencido de que hay que institucionalizar el comercio de granos. El productor no debe ser rehén de grupos cartelizados. Mi pensamiento coincide con el de la Federación Agraria", respondió.
Recientemente, Domínguez tuvo una controversia con las entidades del campo por el anuncio de los dirigentes rurales de convocar a los productores a las rutas el 25 de este mes, el mismo día que se realizarán los festejos por el Bicentenario. El ministro calificó la acción como intento de "sabotaje" a las concentraciones, que los ruralistas dijeron que no serán de protesta.
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